Durante nuestro viaje de nueve días por Marruecos, nos dio tiempo a ver numerosos lugares y disfrutar de cada uno de ellos. Si vas a Marruecos y no tienes aún claro el itinerario, quizás te estés preguntando qué ver en Marruecos.
Pues bien, nosotros hicimos el camino desde Marrakesh hasta el Desierto del Sáhara, pasando por la Ruta de las Mil Kasbahs, lugares como Ouarzazate, La Garganta del río Todrá, el Valle del Dades y Merzouga, hasta llegar al mismísimo desierto del Sáhara donde estuvimos durmiendo, una experiencia increíble.
Así pues, a continuación te contamos qué ver en Marruecos, al menos en esta zona que nosotros conocimos.
Qué ver en Marruecos
Marrakesh
Marrakesh fue nuestra primera parada en Marruecos, el primer lugar que conocimos, así pues, las primeras sensaciones las tuvimos allí.
Por un lado nos pareció una ciudad fascinante, su medina laberíntica, sus colores anaranjadas, la sensación de haber vuelto al pasado en algunas de sus calles. En fin, nos gustó mucho. Quizás no tanto el hecho de lo pesados que pueden llegar a ser, pero bueno, es algo intrínseco al lugar que poco o nada se puede hacer salvo no dar a pie a más conversación si no la deseas.
La Medina de Marrakesh
Esta es la antigua ciudad, la entrada a esta parte de Marrakesh es la entrada a un laberinto de callejuelas. Sí, es realmente fácil perderse durante las primeras horas, luego poco a poco vas cogiendo referencias y más o menos sabes por dónde ir, o eso crees.
No busques un mapa de la Medina, pues no existe, y mucho menos con los nombres de las calles. Tan sólo disfruta en perderte y volver a encontrarte. Y tranquilidad, es un lugar muy seguro, también de noche.
El Zoco
El mercado, el bazar, el lugar donde buscar, comprar y regatear. Puedes ver a los artesanos trabajar los diferentes materiales, madera, latón, lana, y de ahí la mercancía a vender allí mismo.
Si has estado en otros bazares o mercados propios de las rutas comerciales, como la Ruta de la Seda, quizás este no sea el más espectacular, pero merece la pena pasearlo, y quizás comprar algún recuerdo de tu viaje por Marruecos.
Mezquita de la Koutoubia
Se encuentra cerca del epicentro de la ciudad, la Plaza de Jaam el Fna. Su enorme minarete se puede ver desde todos los tejados de la ciudad.
El recinto de esta mezquita, una de las más importantes del mundo islámico, es un oasis de tranquilidad dentro de Marrakesh.
Madraza Ben Youssef
Nunca antes habíamos estado en una madraza o escuela coránica. Y además esta resulta ser de las más importantes y grandes de Marruecos.
Por dentro es realmente preciosas. Sus azulejos coloridos, la madera labrada con motivos islámicos, una especia de vuelta al pasado. Hoy en día es centro de encuentro de los turistas de la ciudad.
Quizás fue uno de los lugares que más me gustaron de la ciudad.
Villa Majorelle
El pasado de Marruecos y Marrakesh está muy ligado al colonialismo francés, de hecho el francés es el otro idioma que se habla en el país.
Pues bien, Yves Saint Lauren decidió que Marrakesh era un buen lugar para vivir, y para ello, compró la casa del pintor, también francés, Jaques Majorelle.
Dentro convirtió la casa en un museo de arte islámico, debido a su interés por esta cultura, y sus jardines en uno de los lugares que no puedes perderte en Marrakesh.
Plaza Jaama el Fna
Un lugar donde el tiempo pasa y se detiene, las luces vienen y se van, muta cada hora, y la actividad nunca para.
Sin duda esta plaza es el epicentro de Marrakesh. Es una plaza en constante movimiento, sus alrededores, la gente que va y viene. La mejor opción es durante el día recorrerla, al atardecer cenar en alguno de los restaurantes que dan a la plaza, y disfrutar desde sus balcones lo que ocurre ahí abajo. Y cuando anochece, volver a la plaza, a seguir viendo cómo todo es diferente en cada segundo que pasa.
Si quieres leer con más detalle lo que puedes encontrarte en Marrakesh, echa un vistazo a este artículo, Qué ver en Marrakesh, perderte por sus rincones.
Ruta de las Mil Kasbahs
La Ruta de las Mil Kasbash es un recorrido por pequeños y no tan pequeños lugares donde las kasbash, ciudadelas de adobe, fortalezas, una forma de ver cómo era el pasado bereber de la zona. La primera parada o punto de partida de esta ruta es la ciudad de Ouarzazate.
Ouarzazate
Como acabamos de decir, Ouarzazate es el inicio de la Ruta de las Mil Kasbahs, pero es mucho más, no te imaginas hasta que no llegas lo que vas a ver.
Kasbah de Taourirt
Esta es la joya más importante de todas las Kasbahs que puedas encontrar por el camino. Adobe y madera, eso es todo, y aún así, a pesar de su antigüedad sigue en pie.
Sin duda, no te puedes ir de Ouarzazate si entrar a visitar esta kasbah. Su interior está realmente bien conservado. De nuevo, una vuelta al pasado, ¿Por qué no? Además, puede que no encuentres a muchos más visitantes a parte de ti dentro de este lugar. Podrás disfrutar de una joya única para ti.
Estudios cinematográficos Atlas
A las afueras de la ciudad se encuentra el Hollywood de Marruecos, y bueno, de gran parte de África y muchos otros continentes.
Estos estudios son realmente importantes para el rodaje de muchas películas que has visto en el cine o televisión. Para que te hagas una idea, algunas de las películas y decorados que puedes ver dentro de estos estudios son Astérix y Obélix; Misión Clopatra, La Joya del Nilo, en el año 1977 Star Wars, Lawrence de Arabia, Gladiator, El Reino de los Cielos, La Momia o Alejandro Magno. ¿Qué te parece?
Puedes leer más sobre Ouarzazate en Ouarzazate, las kasbahs y los estudios de cine.
Valle del Dades
El Valle del Dades es el lugar donde podrás ver los oasis como los entiendes dentro de tu imaginación, donde podrás ver cómo los paisajes van cambiando. Por supuesto, al estar dentro de la Ruta de las Mil Kasbahs, verás pequeñas poblaciones con sus kasbahs, vergeles, y aridez, de todo un poco.
Desde luego creo que es un paisaje impresionante, y más aún viendo desde que atraviesas la cordillera del Atlas cómo van cambiando los colores y los paisajes. Una maravilla de la naturaleza.
Gargantas río Todrá
El Valle del Dades tiene si fin en estas impresionantes gargantas, altísimas, como su hubieran sido cortadas con un cuchillo gigante.
El río Todrá ha ido erosionando sin piedad esta zona, y parece curioso como un pequeño riachuelo, con su trabajo constante ha llegado a erosionar de tal manera esas paredes, que en algunos puntos llegan a alcanzar los treinta metros de altura.
Con estos datos, si te gusta la escalada, que sepas que es un lugar bastante frecuentado por los amantes de este deporte.
Si quieres saber más, puedes echar un vistazo a El Valle del Dades y las Gargantas del río Todrá
No olvides hacerte un seguro de viaje si viajas a Marruecos, te contamos Cómo encontrar el <strong>mejor seguro de viaje para viajar a Marruecos</strong>, y por ser nuestro lector, te puedes aprovechar de un <strong>descuento del 5% pinchando aquí</strong>.Merzouga y Desierto del Sáhara
Llegar a Merzouga es ver cómo el desierto empieza a tener importancia sobre todo lo demás. Se acabaron los vergeles, ya no hay tantos pueblos con niños corriendo como en los kilómetros precedentes.
La arena lo toma todo, y las jaimas empiezan a hacer acto de presencia por el camino.
Nosotros tuvimos la suerte de poder dormir en el desierto del Sáhara, una experiencia realmente impresionante. Estar en un lugar sin a penas contaminación lumínica te permite contemplar las estrellas, y sentir que caen sobre ti. Ya habíamos vivido la misma sensación en el Gran Cañón del Colorado.
La noche bereber, el te, su música, la tranquilidad de un lugar apartado de la civilización.
Para llegar hasta el campamento en el desierto, tuvimos que montar durante algo más de una hora en camello, los diez primeros minutos son divertidos, después el dolor en el culo se ha realmente difícil.
Viaje desde Marrakesh hasta el Desierto del Sáhara
Cuando llegamos a Marrakesh sabíamos que queríamos hacer este viaje, llegar hasta el Desierto del Sáhara y dormir allí.
En el riad donde nos alojamos les comentamos la posibilidad de hacer esta excursión, y la verdad que fueron varias las opciones que nos ofrecieron, y hubo una, la que escogimos, que encajaba perfectamente en precio y tiempo.
Nosotros nos quedamos en el Riad Dar Nakhla.
La verdad que estaba muy bien, era como los riad que siempre has imaginado o has visto en televisión. Nos gustó mucho el ambiente, y lo que más sin duda, la terraza. Dispone de una terraza en la parte más alta con unas muy buenas vistas de la ciudad, tanto de día como de noche. Los encargados de la recepción son de gran ayuda y bastante amables. Merece mucho la pena, nosotros repetiríamos.
Puedes ver precios, fotos y disponibilidad en el siguiente enlace Riad Dar Nakhla.
Essaouira
Essaouira es la contraposición a lo que es Marrakesh. Si esta última se caracteriza por un continuo movimiento de gente, que vienen y van, te preguntan, te intentan vender cosas. Essaouira es todo lo contrario, tranquilidad.
La ciudad costera muestra un día a día de pescadores, de gaviotas, de una medina que es Patrimonio de la Humanidad, de una océano Atlántico que siempre está ahí presente.
La Medina
Es el centro de todo lo que tienes que ver y disfrutar de la ciudad. La fortaleza está realmente bien conservada. Puedes ver los cañones que defendieron plaza, aún mirando al horizonte del mar, oteando posibles enemigos.
Perderse por la medina, encontrar alguna tienda de artesanía local, disfrutar del ambiente bohemio y comer un buen pescado es el mejor plan que tienes para pasar parte del día en Essaouira.
La Playa
La playa de la ciudad es realmente larga, diez kilómetros!! Y debido al viento del Atlántico, uno de sus usos más comunes es hacer deportes relacionados con el viento, como el kite surf.
No sé si sería un lugar ideal para echarte y tomar el sol, quizás no sea el uso más habitual.
Cómo llegar a Essaouira
Essaouira suele ser el plan para perfecto para visitar en un día. Madrugando un poco desde Marrakesh, y volviendo a partir de las cinco de la tarde.
Se puede ir en autobus que se coge en la estación de autobuses de Marrakesh. Sale sobre las 9 de la mañana y la vuelta alrededor de las 4 de la tarde. (Confirmar horarios, ya que sólo hay un autobús al día, y si se pierde tocará dormir en la ciudad).
Otra forma de ir a Essaouira desde Marrakesh es en taxi. Si se coge entre cuatro personas, puede salir el viaje en total por alrededor de 25 euros los cuatro, ida y vuelta. De este modo, da más libertad tanto para ir como para volver.
Si quieres saber más sobre Essaouira, puedes echar un vistazo a Essaouira, la playa y la Medina.
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