Pues sí, aunque no lo creas, Stalin nación en la ex república soviética de Georgia, y no en Rusia como muchos piensan. Y la ciudad que le vio nacer fue Gori.
Gori no es precisamente un lugar al que la gente se acerque demasiado, algunos van simplemente por el hecho de poder ver la casa en la que nació Stalin y el museo dedicado a su figura. Pero Gori tiene algo más, y fueron un par de motivos los que me llamaron poderosamente la atención sobre este lugar.
Más allá de ver todo lo que hay alrededor del hombre del puño de hierro en esta ciudad, quizás te suene Osetia del Sur, y en concreto la Guerra de Osetia del Sur entre Georgia y Rusia en el 2008.
En esta breve, afortunadamente, guerra de nueve días, tuvo como uno de los escenarios más sangrientos la ciudad de Gori. Fue por este motivo por el cual también quería conocer la ciudad.
Aún tengo grabadas en mi retina las imágenes en la televisión sobre esa remota zona de Georgia en la frontera con Rusia, Osetia del Sur. Nunca pensé que en algún momento visitaría la ciudad que veía bombardeada.
Durante este conflicto, el nueve y diez de Agosto del 2008 los rusos bombardearon la ciudad de Gori provocando la muerte de casi un centenar de personas, entre ellas, un periodista holandés. Pero no sólo hubo víctimas mortales, si no que la ciudad fue abandonada por sus habitantes cuando vieron entrar a las tropas rusas. Es decir, una ciudad de casi sesenta mil habitantes se quedó prácticamente vacía durante las casi tres semanas que estuvo tomada por los rusos, simplemente terrible.
Desde luego que no pensaba ver ninguna huella de ese momento, y ciertamente no la vi, pero, por alguna razón, esos sucesos fueron un imán que me atrajo de manera inexplicable.
Iosif Stalin
Pues sí, efectivamente un georgiano fue uno de los dictadores más sanguinarios que ha habido sobre la faz de la tierra, y es curioso por que el supuestamente ruso, resultó ser georgiano, como Hitler. Este no era alemán, si no austriaco, algo de lo que los habitantes de este país siempre se mofan; ”Hitler era austriaco pero todo el mundo piensa que era alemán, y sin embargo Einstein era alemán y todos piensan que es austriaco”.
Stalin, palabra que viene de acero, es el seudónimo que Iósif Vissariónovich Dzhugashvili eligió desde joven. Y es que tenía un gran temperamento desde su juventud. Puño de acero.
Su carrera política se puede denominar como meteórica, pero antes de llegar al partido comunista, estuvo en movimientos políticos clandestinos relacionados con los ferroviarios de Tiflis.
Desde el año 1912 que Lenin le propuso a la elección del Comité Central Bolchevique, que no consiguió, hasta que llegó al poder más absoluto del que nunca se movería, sólo pasaron cinco años.
Su historia posterior se escribe con sangre, persecuciones a disidentes por todo el mundo, gulags en Siberia, auténtica paranoia hacia todas las personas que le rodeaban, en fin.
Pues bien, de Stalin quedaba una estatua de él en Gori, pero en el año 2010, y después de mucha oposición por parte de ciudadanos de la ciudad, se retiró. Así pues, ya no quedan estatuas de Stalin en la ciudad.
Qué ver en Gori
Pues en esta ciudad no todo es Stalin, por suerte hay más cosas, y con una historia más antigua, aunque también bélica.
La fortaleza de Goristsikhe
Esta fortaleza medieval se sitúa en lo alto de una colina. Realmente sólo quedan los vestigios de la muralla y poco más. La plaza debió de ser grande, ya que el tamaño de esta fortaleza no es pequeño.
Se puede decir que se encuentra en el centro de la ciudad, eso sí, en lo más alto, y desde allí se pueden ver unas vistas de 360 grados de Gori.
Jardines Gogebashvili
Justo bajando por el camino de vuelta a la ciudad desde la fortaleza Goristsikhe, te encuentras con estos jardines.
Además de ser un remanso de paz, bueno, Gori en general es un remanso de paz, es de estos lugares donde nunca pasa nada, bueno, el bombardeo que pasó fue demasiado.
Pero es la postal perfecta de una pequeña ciudad interior de Georgia, que no está acostumbrada a los visitantes, pero no por ello son reacios, ni mucho menos.
Dentro de recinto está el Templo de los Santos Arcángeles. Es una iglesia de estilo ortodoxo, parecida a las muchas que te puedes encontrar por el país.
En estos jardines hay una serie de estatuas en bronce, gigantes, de guerreros, ¿Templarios? Mutilados. Cuentan con sus respectivas espadas, en círculo, como tomando decisiones. Y alrededor, símbolos esculpidos en piedra, templarios.
Templo de la Virgen María
Es el lugar, junto con el fuerte, que más llama la atención de Gori, y es que en comparación con el resto de edificaciones es bastante grande.
De nuevo una iglesia ortodoxa, pero en este caso amurallada. Quizás la falta de costumbre de ver ese tipo de arquitectura en las iglesias, hace que llame la atención.
Puedes darte un paseo tranquilo por el interior del recinto. Las escenas cotidianas de Gori es lo que te vas a encontrar.
Avenida Stalin
La Avenida Stalin es la calle que, digamos, articula toda la ciudad, la vía principal. En ella se encuentra el Parque de Stalin, la casa de Stalin, el Museo de Stalin y el Museo de la Guerra.
También es en esta calle donde se encuentran algunos restaurantes para hacer una parada y continuar el viaje.
Casa de Stalin
Y es que Stalin tiene su propia avenida en la ciudad de Gori, y por su puesto culmina con el Parque de Stalin, la Casa de Stalin y el Museo de Stalin.
La casa de Stalin está ubicada en centro de este parque justo antes de llegar al Museo. Está cubierta por una especie de pérgola que intenta que no se venga abajo con las inclemencias del tiempo.
Es una casa pequeña y muy humilde, y es que los orígenes de Stalin eran realmente humildes, pues sus padres, ambos, eran sirvientes.
La casa, donde nació Stalin es en la planta baja, una especie de sótano, y no la planta que da a la calle. En esta planta baja, en una sola habitación, vivían sus padres y él.
Museo de Stalin y Museo de la Guerra
El Museo de Stalin, es además uno de los edificios con más atractivos de la ciudad.
Se inaguró en este Museo en 1957, y es que de alguna manera, en aquella época, esa república soviética de Georgia, había dado al mundo una de las personas más influyentes, y era de Gori, así pues, parecía obvio que se ubicara un museo sobre la figura de este personaje allí.
Nosotros no entramos, pero dentro puedes encontrar bastantes documentos históricos, así como una visión que al menos ya muestra también la crueldad de Stalin con sus gulags y el pacto al que llegó con el otro indeseable del siglo XX, Hitler.
El museo cuenta su trayectoria desde joven, hasta su llegada a lo más alto del partido comunista y de la Unión Soviética. Algunos de los regalos que recibió de otras personalidades a lo largo de su vida también están expuestos en este museo.
Museo de la Guerra
El Museo de la Guerra deja constancia de la participación de Georgia y los georgianos en la Segunda Guerra Mundial.
Pero además, después de la guerra con Rusia en 2008, también tiene una pequeña área dedicado a este terrible evento.
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Gori se encuentra a unos 80 kilómetros de la capital de Georgia.
La forma más barata y rápida de llegar es utilizando el transporte por excelencia del país, la mashkruta.
Este vehículo es una furgoneta, una mini van. Es el transporte que utiliza la mayoría de la población. Llega hasta casi todos los rincones del país, pero dependiendo de tu destino, llegar se puede convertir en una odisea. Pero este no es el caso de Gori.
Desde la estación de Metro de Didube en Tiflis, llegas a la estación de autobuses o Mashkrutas. En esta estación tienes que tener en cuenta un par de cosas. La primera es que no todas las mashkrutas van a Gori, y la segunda, es que hay mucho taxista esperando pillar a algún incauto para llevarle al destino pagando más.
Así pues cuando sales del túnel de la Estación de Didube y entras en la estación de autobuses, debes ir hacia la derecha hasta el final, y allí, fíjate en los carteles que hay en la parte delantera de las furgonetas y busca “Gori”. Así de sencillo.
Al lado de la furgoneta estará la persona que la conduce u otra que trabaje para ellos, que será quien te venda el billete. Sólo cuesta 3 laris (algo menos de un euro), y te dan un billete de “autobús” donde puedes ver claramente el precio. Aquí no hay ningún tipo de engaño.
Alojamiento en Tiflis
La verdad que Tblisi es una ciudad con bastante turismo, sobre todo rusos y otras nacionalidades de ex repúblicas soviéticas, así que si hay algo que no falta es el alojamiento de todo tipo, categoría y precio.
Nosotros fuimos durante la semana del 1 de Mayo, que es la fiesta nacional rusa, por lo que la ciudad, bueno todo el país, estaba lleno de rusos. Nos costó un poco encontrar un alojamiento que estuviera céntrico y que además su precio estuviera bastante bien, por algún motivo todo estaba carísimo.
Finalmente nos decidimos por el Red Fox Guest House. La verdad que está muy bien, es un alojamiento bastante nuevo, las habitaciones son normales y el los baños son compartidos. Además tiene el desayuno incluido.
La localización de Red Fox Guest House es muy buena, pues se encuentra a unos tres minutos o cuatro andando de la Plaza Meidan.
Tamara es la persona dueña del alojamiento y responsable, realmente una persona muy agradable que nos ayudó muchísimo y nos dio mucha información sobre la ciudad.
De hecho, en nuestra vuelta a Tiflis, para tomar el avión de vuelta, nos volvimos a quedar allí.
En el siguiente enlace, Red Fox Guest House, puedes ver la disponibilidad de fechas, precios y más fotos sobre este alojamiento.
También puedes ver más opciones en el siguiente enlace, Alojamiento en Tiflis.
Seguro de viaje Georgia
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