Panamá

Cayo Zapatilla, un paraíso en Bocas del Toro

Si has oído hablar de Cayo Zapatilla, ya tienes que saber que estas dos islas son una especie de paraíso en la tierra. Y desde la Isla de Bastimentos en Bocas del Toro se puede ir en una excursión.

Y si por el contrario, no has oído hablar de Cayo Zapatilla, te adelanto que este lugar es simplemente espectacular.

Bastimentos

Hace unos años Cayo Zapatilla se hizo famoso gracias a un programa de televisión, llamado Supervivientes. Este era un reality donde una serie de personas tenían que hacer de Robinsones Crusoes en una idílica isla del Mar Caribe, y eligieron esta.

Pues bien, cuando llegamos a Bocas del Toro, si una cosa teníamos clara, es que queríamos llegar hasta Cayo Zapatilla y sumergirnos en sus aguas para ver qué es lo que se esconde ahí abajo. Bien es cierto, que ese sumergirnos en el agua, fue básicamente snorkel y un poco de deepboard, muy divertido esto último.

Cayo Zapatilla

Cayo Zapatilla pertenece al Parque Nacional de Bastimentos. Este Parque Nacional abarcar un gran número de islas e islotes, entre ellos, la propia isla de Bastimentos, donde nosotros decidimos alojarnos durante nuestra estancia en Bocas del Toro.

Y aunque este Parque Nacional esconde grandes tesoros, quizás uno de los más idílicos es Cayo Zapatilla.

Comenzamos nuestro periplo a esta isla en una embarcación típica de la zona. Donde nuestra primera parada fue muy cerca de la isla de Bastimentos, para ver unos delfines.

Bastimentos

Bien es cierto, que desde el embarcadero de nuestro alojamiento, ya habíamos visto delfines jugando, pero en este caso, el grupo era más numeroso.

Cayo Zapatilla

Estos delfines suelen estar siempre por la misma zona, de modo que es bastante fácil encontrarlos y verlos jugar, acercándose a nuestra embarcación. Al ser un Parque Nacional se les respeta bastante y los barco no se suelen acercar a ellos, para de este modo, a pesar de ser invasiva nuestra presencia, molestar lo menos posible.

Cayo Coral

Uno de los sitios de coral más espectaculares que he visto, es este Cayo Coral. Un lugar llenísimo de coral en un estado perfecto, cuidado, y con miles de peces.

Cuando llegamos a esta zona, nos tiramos al agua, máscara y snorkel listos para disfrutar de una de las actividades más increíbles de Bocas del Toro, hacer snorkel y disfrutar de lo que hay ahí abajo, que no es poco.

Fue un auténtico espectáculo de color. Corales de diferentes colores, una maravillosa flora bajo el mar, por no hablar de los millones de pececillos de colores. Unos más grandes y otros más pequeños, pero pececillos al fin y al cabo.

El agua era y es prístina, la visibilidad de metros y metros. Creo que no he visto nunca un agua tan transparente. Ni siquiera en Indonesia.

Sin duda hacer snorkel es una de las cosas que más nos gustaron e hicieron disfrutar durante nuestro viaje por Panamá.

Llegada a Cayo Zapatilla

Como he comentado al principio, Cayo Zapatilla son dos islas. Pero al parecer no tienen un nombre específico cada una. Las llaman Cayo Zapatilla 1 y Cayo Zapatilla 2.

Cayo Zapatilla

La cuestión es que no están habitadas, ni nadie se puede alojar en ellas, por lo que la conservación de ambas es muy buen, buenísima.

Nuestro Cayo Zapatilla fue el 2. Cuando nos estábamos aproximando, era increíble ver el color del agua, se veía el fondo. Azul turquesa. La playa era alargada, con arena blanca como la harina, y palmeras y más palmeras. Pero casi no había gente, sólo los turistas que llegábamos a pasar un par de horas en este trocito de paraíso.

Cayo Zapatilla

Justo en frente de la isla 2, había dos mini islotes, la imagen más cercana a una isla con una palmera y ya. Nadar hasta allí costaba un poco por la corriente, pero realmente mereció la pena.

Cuando llegamos a Cayo Zapatilla, decidimos ver qué había dentro de la isla, atravesarla (hay que decir que es bastante estrecha). Al principio fue un camino el que nos llevaba hacia adentro, pero después una pasarela por encima de los manglares no iba a llevar hasta una playa increíble.

Cayo Zapatilla

La pasarela no estaba en el mejor de los estados, así que cada paso, había que asegurar que la tabla no se rompía.

Pero lo mejor estaba por llegar. La playa. Es parte de la playa que rodea la isla, pero totalmente salvaje. Es más, es la primera vez que siento estar en un lugar, que podría ser perfectamente el escenario de una película de Robinson Crusoe. Tanto fue así, que encontramos un coco tirado, y le abrimos golpeándolo contra un tronco de una palmera caída. Lo bebimos y comimos cuales náufragos sedientos y hambrientos.

Cayo Zapatilla

Caminamos por esa playa hasta llegar a la zona donde estaba la barca con la que habíamos llegado hasta allí. Nos enfundamos de nuevo la máscara y el snorkel y nadamos alrededor, hasta llegar a los islotes. La fuerte corriente cansaba, pero el esfuerzo mereció la pena.

Cayo Zapatilla

En esa zona había bastante corriente puesto que estas dos islas son la puerta de entrada a Bocas del Toro, después de ellas, tierra firme está en Jamaica. Lejos, muy lejos. Así que la corriente del mar abierto era intensa.

Más coral y tiburón gato

Para volver hacia Bastimentos, hicimos dos paradas más, a parte de la parada para comer.

Llegamos hasta una amplia zona de coral que se encuentra entre las dos islas. Nos dedicamos a nadar bordeando el coral, y ocurrió algo que ni sabíamos ni intuíamos. Tuvimos nuestro segundo encuentro con tiburones en Panamá.

Si en la Isla de Coiba, habían sido más de una docena de tiburones de punta blanca nadando debajo de nosotros. En este caso fue un tiburón gato el que nos encontramos, pero tan pronto como nos vio, huyó.

También fue bastante curioso sentirse el deseo de una rémora. Sí, llevaba un rato, mientras nadaba, sintiendo cómo algo no hacía más que pellizcarme en la pierna. Hasta que por fin vi que era una rémora. Para quién no sepa qué es una rémora, es un pez que se adhiere literalmente a otros peces para ser transportados de un lugar a otro. Vamos, que la rémora me eligió como su medio de transporte, pero eso fue por pocos metros.

La verdad que esta zona de coral tenía una biodiversidad increíble. Tanta fauna y flora en tan poco espacio. Realmente este Parque Nacional de Bastimentos, se merece ese título, y además, se agradece que esté tan bien conservado.

DeepBoard en Cayo Zapatilla

Una vez terminamos con el coral empezamos con el DeepBoard, ¿Que no sabes lo que es eso? Pues nosotros tampoco hasta que el tipo del barco nos lo enseñó. Es una tabla con forma de media luna, atada al barco.

Te permite sumergirte en el agua y disfrutar de una sensación de velocidad que no es real. Ver el fondo desde otra perspectiva, en fin, que además es muy divertido.

Lo hicimos en dos grupos durante a penas quince minutos cada grupo de dos personas. Yo lo hice en el segundo grupo, y no me imaginaba, que yendo tan lento el barco, pudiera dar esa sensación de velocidad. Como si fuéramos a salir volando, pero tan sólo era una sensación, divertida, eso sí.

Osos perezosos

Esta fue la última actividad del día, en busca de osos perezosos en el Parque Nacional de Bastimentos. Esta vez, entre los manglares, y como parece que siempre andan por las mismas zonas, allí nos llevaron, y allí los vimos. Eso sí, esta vez demasiado lejos como para poder distinguir qué es lo que se escondía detrás de esa bola en las ramas.

La verdad, que no fue la mejor manera de verlos. Donde vimos osos perezosos realmente bien, fue en la Isla de Colón, en la playa de Star Fish, y en la playa de Wizard en Bastimentos.

Bastimentos

Así pues, si hay un lugar donde puedes ver perezosos en libertad, sin que nadie les moleste, y alejados del tráfico de animales, es en Bocas del Toro, su hábitat natural.

Cómo ir hasta Cayo Zapatilla

Nosotros llegamos hasta Cayo Zapatilla e hicimos todas estas actividades en barco. En nuestro alojamiento en Bastimentos, contratamos esta excursión.

Los chicos belgas que llevan el alojamiento donde nos quedamos, conocen a un chico que tiene una barca de las que se suelen utilizar para ir de una isla a otra. Una especie de taxi-boat. Pues bien, es este chico el que nos llevó y nos enseñó lo sitios que visitamos. La verdad que estuvo muy bien, lo volveríamos a hacer.

Alojamiento en Bastimentos

Cuando decidimos quedarnos en esta tranquila isla, también buscamos un alojamiento tranquilo y espacioso.

Encontramos el Ataraxia Guest House, un alojamiento que ahora llevan una pareja de belgas con muchas ganas de recuperar el lugar que fue.

La casa es una antigua hacienda de cacao, y de estilo colonial, con unas terrazas enormes, donde ver el atardecer y el amanecer. También puedes disfrutar del espectáculo de los colibríes revoloteando mientras desayunas.

Bastimentos

Bastimentos

Están recuperando también todo el terreno que tienen para conseguir ser autosuficientes, en la medida de lo posible, tanto en comida como energía. Una buena forma de cuidar la isla.

Bastimentos

Bastimentos

El lugar nos encantó, y la pareja nos echaron una mano con cualquier pregunta que teníamos, así como darnos información muy útil sobre la isla.

Sin duda alguna lo recomendamos. Si quieres ver más fotos del lugar, precios y disponibilidad, puedes echar un vistazo al siguiente enlace, Ataraxia Guest House.

O si prefieres ver otras opciones en la isla, puedes ver este enlace, Alojamiento en Isla Bastimentos.

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Sobre mí

Raúl

Me fascina viajar, y hasta cierto punto estoy obsesionado con los viajes. Siempre intento tener un billete de avión en la cartuchera.
Recuerdo el momento que por primera vez pisé el extranjero, tenía 18 años, ese fue un viaje de ida, aún quiero seguir conociendo más y más.

4 Comentarios

  • Hola Raul, excelente el artículo, fui 2 veces a los cayos zapatillas, la última vez fue hace 20 años, me llevó un lugareño en un tronco calado, de hecho pasamos la noche con mi novia en zapatilla 1 (hoy mi esposa) entre jejenes y cucarachas jeje, ayudamos al guardaparques a limpiar la isla para que nos permitiera quedarnos, obviamente pidió permiso a un superior por la radio (no había internet en ese momento) Zapatilla 2 estaba vacía porque habían terminado de grabar Supervivientes para Francia, así que no había nadie, creo que fue uno de los mejores cayos que conocí en mi vida, con una playa que parecía una inmensa pileta de natación con el fondo de arena clara y suave. El color del agua era increíble, tal cual lo mencionas.
    Zapatilla 1 me pareció bonito, pero no tenía buenas playas, además con tantos corales no se podía disfrutar del mar para nadar.
    Extraño el turismo de esa época donde había poca gente en todos lados, ahora hay que hacer cola hasta para escalar el Everest.
    Estoy pensando en volver con mis hijos, cruzando por la frontera de sixaola en Costa Rica.
    Te quería preguntar si Zapatilla 2 está abierta todo el año, porque hace muchos años solía estar prohibido visitarla en algunas épocas del año. Saludos!

    • Hola Diego,

      Wow qué aventura, como en los viejos tiempos, donde viajar era más aventura y sin tanta gente. Pues a ver, supongo que si no hay problemas por el clima o por que estén grabando algún programa de TV, Zapatilla 2 sí que está abierta.

      Saludos!!

  • Que linda aventura! Es muy divertido leer experiencias similares a la de uno. Yo también he ido y conocí algunas de las atracciones que mencionas como snorkel, delfines, etc. (y de hecho, lo comento en mi blog). Ya te digo, quede fascinado con el snorkel, lejos una de las actividades mas divertidas que he hecho 🙂 Gracias por compatirlo y hacerme recordar buenos momentos! Saludos!

    • Hola Martin,

      La verdad que Cayó Zapatilla es un lugar increíble, todo un paraíso que no puedes dejar de visitar si viajas a Panamá. Nos encantó y volveríamos un millón de veces.

      Saludos!!

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